Hotel Pousada Chale Cana Brava Guaramiranga

Reseña de un crítico de hotel

Recientemente tuve la oportunidad de disfrutar de una escapada romántica en la Pousada Chale Cana Brava en Guaramiranga, y la experiencia fue simplemente maravillosa. Desde el primer momento, el ambiente íntimo del lugar me conquistó: mi habitación contaba con un balcón que ofrecía una vista impresionante del jardín, perfecto para disfrutar de un vino al atardecer junto a mi acompañante. La atención al detalle es digna de mención, ya que además de la conexión WiFi gratuita, la suite tenía una pequeña cocina equipada que nos permitió preparar desayunos encantadores con productos locales. La cercanía al aeropuerto Pinto Martins, aunque a 105 km, no fue un inconveniente, ya que el viaje valió cada kilómetro recorrido. En resumen, si buscas un rincón especial en el corazón de Brasil, esta pousada es una joya escondida que combina confort y encanto natural. ¡Sin duda, regresaré!